Existen casos reportados en los que ciertas personas pueden tener reacciones graves a las vacunas COVID de Pfizer / BioNTech, Moderna y Johnson & Johnson. Todos parecen presentar efectos secundarios similares y mayores riesgos para un grupo muy raro de personas en general, según los datos disponibles.
Los efectos más comunes reportados en las vacunas COVID 19 en general se presentan como :
- Dolor de cabeza
- Sudoración
- Malestar general en la zona de la vacuna
- Disminución de la energía o fatiga
En algunos casos un poco más contados puede aparecer
- Fiebre
- Ganglios linfáticos inflamados
- Vómito
En casos extremos de dos a 5 por cada millones de personas se puede presentar caso de anafilaxia.
La buena noticia es que, para la gran mayoría de las personas, los efectos secundarios parecen ser relativamente leves y duran desde horas hasta un par de días.
«Es posible que tenga algunos efectos secundarios, que son signos normales de que su cuerpo está generando protección. Estos efectos secundarios pueden afectar su capacidad para realizar las actividades diarias, pero deberían desaparecer en unos días. Algunas personas no presentan efectos secundarios».
Eso no significa que sean agradables. Según los CDC, los efectos secundarios más comunes de las vacunas COVID actualmente autorizadas son: dolor en el brazo en el lugar de la inyección o en todo el brazo donde se administró la inyección; hinchazón en el brazo de administración; enrojecimiento; fatiga; dolor de cabeza y mareos.
Estos efectos secundarios comunes no son realmente tan diferentes de muchas otras vacunas, aunque pueden parecer un poco más aleatorios.
El enrojecimiento, los dolores musculares, la hinchazón, las náuseas, la fiebre y la fatiga son reacciones bastante normales incluso a una vacuna tradicional contra la gripe. Tu cuerpo está construyendo un arsenal de defensas contra un enemigo que no ha encontrado. Ese trabajo de fabricación interna puede provocar inflamación u otras reacciones extrañas de tu cuerpo a medida que se ajusta.
Pero las vacunas COVID también pueden traer algunos eventos adversos mucho más extraños, aunque más raros. Por ejemplo, existe evidencia de que después de una segunda dosis de las vacunas Pfizer o Moderna, tuvieron una reacción en los ganglios linfáticos que provocó el desarrollo de bultos en la zona de la clavícula o el cuello. Esto puede ocurrir a los pocos días de la administración de la vacuna, pero también tiende a desaparecer a los pocos días sin un daño duradero.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) tiene un registro central ordenado por la ley federal para realizar un seguimiento de todos los efectos secundarios de las vacunas llamado Sistema de notificación de eventos adversos de las vacunas, qué es la forma en que conocemos algunas de estas reacciones más raras.
Según el sistema, muchos de los que padecían efectos secundarios más graves, como anafilaxia, tenían antecedentes de alergias.
Es importante consultar a tu médico antes de optar por una vacuna en
específico, contar con la ayuda de un profesional de la salud será siempre recomendable sobre todo en casos particulares de alergia o asma por ejemplo.
La información siempre será nuestra mejor aliada para tomar la mejor decisión informada.
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