Opinión

La gastronomía en las Elecciones

Por Jorge Adrián Rodríguez Ospina.

Estamos a contadas horas de elegir presidente en nuestro país: Colombia, y muchos dirán por qué esta persona habla de comida en vísperas de un tema tan magno como la elección del presidente, pues querido lector, quiero contarle que la gastronomía mueve un factor determinante en las votaciones y la economía local de los barrios y puntos de votación.

Probablemente este domingo se verán puestos de empanadas, chorizos, morcilla, una deliciosa papa rellena sea de pollo, carne, o la mixta que tiene huevo cocido, la deliciosa mazamorra, el calentado de frijoles con carne, las migas, el tamal, el buñuelo reciente salido del aceite pero sequito a la hora de ser mordido, el pandequeso, las carimañolas o la arepa de huevo en la costa del país, el enyucado, el aborrajado y las marranitas (croquetas de plátano verde con un interior de trozos de chicarrón crocante) en Cali, la changua en toda la zona de Cundinamarca y Boyacá, las arepas de mote, el queso pera, el pandebono, la longaniza, la torta de carne con arepa, los huevos al gusto, un delicioso café recién tostado y molido, el chocolate negro en agua o en leche, el jugo de naranja, entre otros productos.

En fin, una serie de alimentos que se encuentran listos en las vitrinas y en las manos de cientos de personas que se levantan desde tempranas horas para llenar sus puestos de comida, para que el comensal que sale desde su casa para las urnas, haga el pare y se antoje de una rica y amplia oferta gastronómica que tiene nuestro país en las ventas formales, ambulantes o los puestos de comida que solo los ubican para las elecciones.

Es tan amplia y rica la oferta de comida en Colombia que es irresistible no parar y probar uno o varios de los alimentos ya mencionados, y demás que quizás no ilustré, aparte de la amplia oferta de frutas que se cultivan en nuestro país. Por ende, mencionaba al comienzo de esta columna que la gastronomía se vuelve más que importante en un día crucial como lo son las elecciones para Presidente de la República; ya que no solo ganan los candidatos votos en las urnas, sino también las personas que tienen sus puestos de comida.

Una cosa es votar con hambre y la otra es votar con el estómago lleno, decían nuestras abuelas que las personas que se alimentan bien constantemente tienen un ánimo diferente frente a aquellas que no tuvieron la oportunidad de comer.

Amigo lector dese la oportunidad de probar esa rica y amplia oferta gastronómica que tenemos en los barrios de nuestras ciudades, o si tiene la oportunidad de asistir a uno de los reconocidos restaurantes, hágalo, aporte un poco de sus recursos para apoyar la economía gastronómica del territorio, y si quiere vivir una experiencia diferente dese la oportunidad de madrugar a las plazas de mercado, en estos puntos usted se podrá encontrar con cocineras ancestrales que dan todo de sí para que sus papilas gustativas hagan un carnaval de emociones para que su estado emocional cambiará notablemente.

Finalmente, no se quede en casa este domingo, todos tenemos el deber de votar y elegir al futuro presidente del país, en el que recaerá la responsabilidad de ampliar las ayudas a nuestros campesinos quienes son los que producen tanta diversidad de alimentos y por ellos es que diariamente podemos tener un plato de comida en nuestros hogares.

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