Con un recorrido por la parte alta de la montaña, en el que se evaluaron las grietas y rocas, la Secretaría de Infraestructura de Caldas y la Alcaldía de Manzanares determinaron dar paso en el sector de Bellavista, donde el pasado 29 de diciembre de 2020 se presentó un derrumbe de gran magnitud. Desde esa fecha, equipo técnico de la administración municipal y departamental trabaja en la recuperación del paso.
Gerardo Duque Osorio, alcalde de Manzanares, acompañó el recorrido y explicó que la montaña venía con problemas desde el 23 de diciembre. El deslizamiento se presentó el 29 y desde ese día trabajan conjuntamente en la zona personal de la Alcaldía de Manzanares, de la Secretaría de Infraestructura, Bomberos y Defensa Civil. “Es un trabajo intenso y después del mediodía del jueves 7 de enero podremos dar vía parcialmente”, indicó.
La coordinadora del Cuerpo de Bomberos, Diana González Giraldo, informó que hacen presencia en la zona desde el 23 de diciembre, cuando se iniciaron pequeños desprendimientos de tierra. “Hemos estado con la Alcaldía de Manzanares y el Grupo de Gestión del Riesgo haciendo monitoreo. Tuvimos personal ubicado en la parte superior del derrumbe para apoyar al operador de la retroexcavadora, y abajo realizando el pare y siga para vehículos”, comentó.
“Como el terreno presenta grietas, el personal de monitoreo ahora se ubica en la parte del frente con binoculares y en constante comunicación con el operador de maquinaria para informar el comportamiento del derrumbe. El día 23 se hizo la evacuación preventiva de las fincas ubicadas en la ladera del río Santo Domingo, hacemos monitoreo constante, pendientes de que no haya un represamiento”, acotó la líder del Cuerpo de Bomberos.
El secretario de Infraestructura de Caldas, Luis Alberto Giraldo Fernández, recorrió la zona del derrumbe en compañía de operarios de maquinaria y equipo técnico de la Gobernación de Caldas. Una vez evaluado el estado de la montaña, señaló que Bellavista es un sitio que falló hace varias décadas, el deslizamiento se contuvo con una obra de estabilidad que duró varios años, un muro grande con caissons hincados sobre la ladera.
“Con los aguaceros y el Fenómeno de La Niña, la montaña ha venido teniendo un movimiento importante. Con el derrumbe se perdieron más de 30 metros de banca”, explicó Giraldo Fernández. “Vamos a demoler las piedras más grandes para evitar el riesgo de que resbalen y caigan sobre la vía; con la retro de orugas haremos una pantalla adicional, con una terraza en la parte alta de la vía para que haya un sector ‘fusible’ donde pueda caer material de derrumbe, y que no caiga directamente sobre la carretera”, concluyó Giraldo Fernández.
El secretario de Infraestructura agregó que se instaló tubería para llevar agua a las veredas, además de un tubo de alcantarillado para el control de aguas lluvia. El monitoreo continúa con los coordinadores de zona supervisados por la secretaría, además del personal de la Alcaldía de Manzanares. Se dará paso desde hoy, pero de acuerdo al comportamiento de la montaña no se descarta el cierre de la vía en las noches.
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