Ambientar cada hogar de manera personalizada, destacando el gusto y las particularidades de quien o quienes viven allí, genera espacios más cálidos y acogedores, que invitan a visitarlos y a compartir momentos en ellos.
Las tendencias cambian con el paso del tiempo, y la decoración de hogares o el diseño de interiores también es una expresión de ellas. Por eso, además del gusto personal de cada uno, es necesario tener en cuenta algunos factores que inciden al momento de elegir la decoración de una casa.
Arte en las paredes
Los cuadros decorativos son un gran aliado de la moda y la decoración. Estos aportan color, texturas, generan ambientes y “visten” a una casa. Contar con la presencia de cuadros en los distintos ambientes, especialmente en la sala o en el comedor, ayudará a generar espacios más modernos y sofisticados.
Existen muchos estilos diferentes de cuadros para sala, que pueden ser figurativos (donde se representan imágenes reales), abstractos (donde predominan el color y las formas ficticias), cuadros modernos que presentan siempre características de las tendencias actuales.
Lo mismo ocurre con los cuadros para la sala comedor. Por lo general, las imágenes que se encuentran dentro de esta categoría son aquellas que transmiten tranquilidad, claridad, bienestar, para poder compartir los momentos de comida (desayuno, almuerzo, cena) con más serenidad.
En general, en la sala se suelen usar cuadros en tríptico, es decir, imágenes conformadas por tres cuadros diferentes, mientras que en la sala comedor suelen utilizarse cuadros de una única pieza. Los tamaños siempre varían de acuerdo al tamaño de la habitación.
Comodidad y estilo
Otro elemento que se ajusta siempre a las tendencias, y que además de brindar estilo a la casa ofrece comodidad, es el sofácama. Estos muebles son fundamentales en la decoración, en el estilo y en la funcionalidad de una sala.
Un sofá cama pequeño puede adaptarse fácilmente a cualquier habitación, ya sea un dormitorio grande, una sala de estudio o una sala. Los sofá camas modernos brindan exclusividad y elegancia a la casa.
Estos muebles suelen ser muy costosos, especialmente si se trata de aquellos que son última tendencia, sin embargo, existen opciones de sofacamas económicos que permiten a los usuarios contar con un producto de diseño a precios accesibles.
Cómo elegir un cuadro
El arte es algo muy subjetivo, por lo tanto existen muchas opciones de cuadros diferentes, con distintas combinaciones de color, formas, temáticas, etc. Para poder elegir un cuadro ideal para un ambiente del hogar deberán tenerse en cuenta algunas cuestiones.
Colores
En primer lugar, deberá evaluarse la paleta cromática que predomina en el espacio. Es decir, habrá que identificar cuáles son los colores que más se repiten en el ambiente en donde se quiere colocar el cuadro.
Existen colores complementarios, que pueden combinarse con naturalidad, generando climas armoniosos aunque no se trate de colores similares o de la misma gama. Los colores complementarios son el rojo y el verde, el azul y el naranja y el amarillo con el violeta.
Otro factor que debe evaluarse es la intención, es decir, de acuerdo al clima que se quiera generar se elegirá el cuadro correspondiente. Si se quieren crear ambientes que brinden sensación de calma y tranquilidad, los cuadros con tonos claros y figuras simples suelen ser ideales.
Por otro lado, si lo que se desea es generar espacios con personalidad, fuertes, se podrán elegir cuadros con colores puros y saturados, como el amarillo, el rojo, el azul combinados con acentos en color negro o blanco.
Los colores de un ambiente ayudan mucho a generar diferentes sensaciones. Si en el espacio en donde se colocará el cuadro predominan los tonos neutros, como grises o marrones, entonces un cuadro con colores fuertes servirá para dar vida y alegría.
Si los colores que predominan son fuertes o muy saturados, entonces se podrá elegir un cuadro en colores claros que ayude a armonizar el ambiente.
Espacios
Otro aspecto que debe evaluarse es el espacio en donde será colocado el cuadro. No es lo mismo un cuadro para una sala que para una sala comedor, o para un dormitorio.
Por lo general los cuadros para sala suelen conformarse en forma de tríptico, en donde tres piezas independientes conforman una única obra. Estos cuadros son tendencia y suelen colocarse sobre el sofácama que se encuentre en la habitación.
Si el cuadro será colocado en la sala comedor, entonces por lo general lo más usual es utilizar piezas únicas y de un tamaño moderado, que no generen un exceso de información en el lugar.
Para los dormitorios suelen utilizarse cuadros en tonos claros, desaturados, que ayuden a generar climas de calma, tranquilidad y descanso. Por lo general se ubican en la misma pared en que se encuentra la cabecera de la cama.
Tamaños
El tamaño del cuadro que debe elegirse guarda una estrecha relación con el tamaño de la habitación en donde será colocado. En ambientes más bien grandes y amplios, pueden utilizarse cuadros de gran tamaño que completan la decoración del lugar.
Si las habitaciones son más pequeñas, dependerá también de la cantidad de muebles y objetos que se encuentren en ella. Si está despojada de otros objetos, entonces el cuadro podrá ser grande, ya que será el acento decorativo del lugar.
Si la habitación es pequeña y además contiene muchos muebles y objetos, entonces lo ideal será que el cuadro sea de un tamaño moderado, evitando así el exceso de información que pueda generarse en la sala.
Personalidad
Por último, el factor decisivo que influirá directamente en la elección de un cuadro para un espacio hogareño será la personalidad y el gusto de quien lo elija.
Es fundamental que una casa esté ambientada con objetos que sean tendencia pero que también se correspondan con el gusto y estilo de quien la habita, ya que de eso dependerá que una persona pueda apropiarse de sus espacios.
Existen muchos objetos que ayudan a decorar una casa de la manera deseada, los cuadros y los sofácama son dos elementos fundamentales para ello.
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