En un despliegue simultáneo urbano y rural, la Policía Metropolitana de Manizales neutralizó dos situaciones de riesgo este fin de semana. El primer caso ocurrió en el sector del Parque Caldas, donde un hombre de 54 años fue capturado tras amenazar a un ciudadano de 60 años con una pistola Glock 9 milímetros. La rápida reacción de los uniformados del CAI Centro permitió interceptar al sospechoso en el barrio Linares, donde se le incautó el arma con cuatro cargadores y 36 cartuchos disponibles.
Mientras tanto, en zona rural, otro operativo dio resultados positivos. En el kilómetro 7 de la vía Manizales-Neira, agentes de la Subestación Alto Bonito capturaron a un joven de 18 años, alias «Tiguer», quien portaba ilegalmente un revólver Smith & Wesson calibre .38 con dos municiones. El procedimiento se realizó durante un control vehicular y peatonal como parte de la estrategia de seguridad rural.
Ambos detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación. El primer implicado fue judicializado por intimidación con arma de fuego, mientras que el joven enfrenta cargos por porte ilegal de arma de fuego. Pese a las capturas, un juez de control de garantías decidió dejarlos en libertad, aunque vinculados a los respectivos procesos investigativos.
Las autoridades destacaron el papel fundamental de la comunidad en estos resultados. «La denuncia oportuna en el caso del Parque Caldas fue determinante para evitar una posible tragedia», señaló el comandante del CAI Centro.




